Otro peligro es que en su búsqueda por eliminar a las elites establecidas para alcanzar una forma más directa de democracia, sin intermediación, los conservadores populares terminen produciendo un vacío que les impida a las naciones pensar y actuar en base a consideraciones de largo plazo. De hecho, el autor del libro señala a la Argentina como un ejemplo de lo que le puede ocurrir a los Estados.
Efectivamente, en la última parte del libro (“una advertencia desde Buenos Aires”) De Santibañes describe el ascenso y el declive de las clases dirigentes argentinas. De la generación del 37 y del 80 del siglo XIX a una elite agotada que decide en la década de 1940 retirarse de la cuestión pública. Desde entonces, aquellas áreas de gobierno que requieren de pensamiento estratégico (defensa nacional, educación pública, políticas fiscales y política exterior) sufrieron enormemente.
La segunda tesis del libro sostiene entonces que la decadencia argentina no se debe a ningún gobierno en particular, sino a la falta de una clase dirigente formada, influyente y comprometida con el futuro del país.
En su “La Rebelión de las Naciones” Francisco De Santibañes ofrece un aporte valioso para interpretar los recientes cambios en el plano internacional que impactan de lleno en nuestro país. Escrito a manera de ensayo, con abundante información y buenas referencias, el autor eligió -afortunadamente- un estilo de escritura que apunta tanto a especialistas como a un público interesado por estos temas. En mi opinión, un libro insoslayable.
.